La Calle Comonfort inicia frente a Catedral y corre paralela a la calle Juan Ruiz de Alarcón, con solo tres cuadras de extensión, la calle Comonfort es un bello rincón de Cuernavaca, con fachadas llenas de flores y ese aire proviniciano que ha hecho de esta Ciudad la favorita del turismo, en esta calle hay algunas de las casas más antiguas de la Ciudad.
En la calle Comonfort se ubican algunos de los restaurantes que en años recientes se han asentado en el Centro Histórico, entre ellos podemos enlistar al Restaurante Casa Gabilondo, ubicado en lo que fuera la casa del ilustre compositor mexicano Francisco Gabilondo Soler “Cri-Cri”, está también El restaurante y cafetería El Vienés de carácter europeo, un Restaurante de Comida Oaxaqueña llamado Casa Tikal y el restaurante Mercado Comonfort son otros que no debe perderse.
Puede tomarse un buen café sentado en la terraza de Las Campanas, o tomarse un energético jugo mientras descansa en alguno de los divanes que existen en el lugar, toda una experiencia relajante. O tomar un helado en mil 800, mientras disfruta del sol de Cuernavaca.
El restaurante “Los Campesinos” ofrece un menú muy económico, puede disfrutar de su comida en una casona que está ambientada con objetos del siglo pasado, como viejos teléfonos, televisiones, tocadiscos y consolas.
Y por las noches, el lugar adquiere nueva vida con algunas de las mezcalerías y chelerías del lugar, como el “feisbuk”, donde vive un muy buen ambiente .
Los fines de semana se instala en esta calle una pequeña feria del libro, en donde encontrará los Best Sellers más cotizados del momento, lo mismo que libros que cuentan la historia de nuestra ciudad, libros de viejo y libros de texto, también pueden encontrarse manualidades y artículos didácticos, además discos de acetato, compact disc, carteles de cine de películas del siglo pasado que son de colección, fotografías antiguas y artesanías, así como algunas antiguedades pequeñas.
Así que este fin de semana dése una vuelta por la Calle Comonfort y viva una experiencia cultural y gastronómica sin par en la capital morelense.
