Monasterio edificado por los franciscanos entre 1530 y 1550, y cedido después, mediando varios litigios, a los dominicos definitivamente en 1586.
Es curioso ver que su planta es la típica de estos conjuntos pero girada totalmente sobre el eje oriente-poniente, quedando el claustro al norte y la iglesia al sur, de tal modo que la puerta porciúncula, que normalmente ve al norte, aquí ve al sur. Es esta portada muy semejante a la lateral de Cuernavaca, mientras que la principal es muy sobria, con detalles renacentistas.
![Convento de Tlaquiltenango](https://exploramorelos.com/wp-content/uploads/2020/09/Tlaquiltenango1-010-scaled-e1600975358237-767x1024.jpg)
Como curiosidad vemos que las capillas posas se encuentran rodeando el atrio cuyo eje es la fachada lateral, hacia el sur y no, como en los otros conjuntos, hacia el poniente del templo.
El convento tiene su entrada a través de la portería que nos conduce a los corredores de la planta baja y sus dependencias, quedando en la superior las celdas de los frailes. Hacia el norte debió haber estado la huerta.
![Convento de Tlaquiltenango](https://exploramorelos.com/wp-content/uploads/2020/09/Tlaquiltenango1-013-scaled-e1600975434570-767x1024.jpg)
![Convento de Tlaquiltenango](https://exploramorelos.com/wp-content/uploads/2020/09/Tlaquiltenango1-015-767x1024.jpg)
La pintura mural no podía estar ausente en este convento y en algunas partes había restos de códices, como el Mauricio de la Arena, que fue encontrado en uno de los muros.