En el corazón de la ciudad, se levanta airoso el Templo Mayor de la ciudad: Santiago Apóstol conocido por Santo Domingo seguramente por la presencia de frailes de esta Orden que habitaron el convento anexo.
Los dominicos de Oaxtepec hicieron visita a Cuautla desde 1528 y por la década de 1580 construyeron la casa-monasterio. El triunfo de la Corona sobre el Marqués, por el que éste pierde las Amilpas, dio importancia a los dominicos como sus representantes y a Cuautla como centro del corredor por el que eran trasladados los metales obtenidos en las minas en su paso hacía México. El conjunto está formado por su atrio, reducido por la apertura de una plaza municipal; la iglesia es de una sola nave y cada lado de la cúpula hay dos pequeñas capillas, en el segundo tramo de la nave se encuentran el bautisterio y una capillita.
La portada del templo ha sido profundamente modificada: en su remate al que fueron añadidas las balaustradas en época reciente, tiene dos torres a los lados; el claustro quedó separado del conjunto y en sus muros se delataban pinturas murales; es de una sola planta con su amplio patio con limpios corredores.
Como en todos los conventos las restauraciones han dejado al descubierto las etapas de la historia, tuvo relevancia significativa en la lucha del Sitio de Cuautla, como Fuerte del General Leonardo Bravo durante el Sitio de Cuautla de 1812, con el tiempo ha sufrido grandes modificaciones a causa de los diversos usos ha que a estado sujeto pues sirvió también como cuartel del Ejército Zapatista, Preparatoria de la U.A.E.M. y Casa de la Cultura, hace algunos años fue devuelto a la Iglesia, situación que ha permitido un reacondicionamiento para las funciones eclesiales convirtiéndose ahora en Casa de la Cristiandad.